Cocina sin Carné

Fernando nos propone un risotto, en esta ocasión con todo el sabor de un buen guiso de rabo de toro. ¡Os encantará!

Ingredientes:

• codillo de jamón.
• 1 puerro y 1 cebolleta.
• 1 trozo de bulbo de hinojo.
• 1 zanahoria.
• 1/2 pimiento y 1 tomate.
• 1 vaso de vino blanco.
• romero, tomillo y azafrán.
• sal y aceite de oliva.
• guiso de rabo de toro.
• arroz carnaroli.
• 1 cebolla.
• 2 calçots y 2 chalotas.
• queso curado para rallar.
• cebollino para decorar.

Hacemos un caldo con codillo de jamón, un puerro, una zanahoria, medio pimiento, una cebolleta, un trozo de bulbo de hinojo, un tomate, un poco de vino blanco, romero y tomillo, sal y un chorrito de aceite de oliva.

Desmigamos la carne, desechando todos los huesitos. Podemos usar los restos de un guiso de rabo de toro que hayamos hecho nosotros o bien optar por  usar una lata. Algunas marcas ofrecen productos cocinados muy aceptables.

Cuando el caldo esté hecho lo sacamos a otro recipiente y en esa misma cazuela empezamos a pochar la chalota, la cebolla y los calçots, todo bien picadito. Rehogamos el arroz en el sofrito e incorporamos el medio vaso de vino blanco. Después iremos incorporando poco a poco el caldo, un poco de sal y un picado de tomillo y romero. Remover el arroz continuamente.

Incorporamos el azafrán a mitad de la cocción, vigilando siempre la cremosidad y, cuando falten unos cinco minutos para que esté el arroz, añadimos la carne desmigada.

Rematamos con el queso curado (sin miedo), que rallamos por encima, todavía en el fuego, para que quede cremoso al máximo.

Adornamos al final con un poco de cebollino.

Recordad que un risotto es para comer de la cazuela al plato de forma inmediata, que es cuando está mejor.