Cocina sin Carné

Suponemos que ya hacéis vuestras pruebas con las ensaladas. Mezclar diferentes ingredientes, incorporar nuevos elementos… Si no es así, no debéis tener miedo a hacerlo. El resultado casi siempre es satisfactorio y, en algunas ocasiones, es espectacular. Aprovecho para comentaros que las ensaladas con arroz integral, en comparación con el arroz blanco, ganan muchísimo en textura y sabor.

Ingredientes:

• 1 cebolleta,
• 1 tomate maduro,
• 1 pimiento verde,
• 1/2 calabacín,
• 3 tomates secos,
• 12 aceitunas verdes,
• sardinillas ahumadas,
• 120 gr. de arroz integral,
• sal, eneldo y aceite de oliva virgen.

Comenzamos hirviendo el arroz con una pizca de sal. Los tiempos de cocción varían así que lo mejor es mirar en el paquete y hacer caso de las instrucciones del fabricante. Mientra se enfría nuestro arroz vamos arreglando las verduras y el resto de ingredientes.

Limpiamos el calabacín dejándole la piel y lavamos el tomate, el pimiento y la cebolleta.

Cortamos todas nuestras verduras frescas en cuadraditos, intentando que nos queden del mismo tamaño.

Cortamos también las aceitunas en 3 rodajas cada una y los tomates secos en tiras finas o cuadraditos.

Cuando el arroz esté frío, mezclamos todos los ingredientes en un bol amplio y agregamos algo de aceite de oliva y sal al gusto, intentando recordar que tanto las aceitunas como las sardinillas añaden por si mismas algo de sal a nuestro plato. Dejamos que reposen los ingredientes mezclados en la nevera al menos 1 hora.

Cuando vayamos a servirla, sacamos la ensalada de la nevera con un poco de antelación, volvemos a mezclar bien los ingredientes, probamos y rectificamos de sal o de aceite si fuera necesario.

Emplatamos colocando en cada plato unas cucharadas de ensalada de forma alargada, y sobre ella de 3 a 5 sardinillas por comensal. Terminamos poniendo un hilillo de aceite de oliva sobre el conjunto, una pizca de eneldo y algunas escamas de sal Maldon.

Veréis que el resultado es riquísimo, ¡ya me contaréis

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