Los huevos de oca equivalen a tres huevos de gallina, tienen menos clara y la yema más grande y sabrosa.
Si además los acompañas con unos boletus confitados se convierten en un manjar que puede transportarte, aunque sea por unos minutos, al cielo.
Ingredientes:
- 1 patata.
- 1 huevo de oca.
- 200 gr. de boletus confitados.
- aceite de boletus.
- sal y pimienta.
Sacamos los boletus del aceite en el que los confitamos en su día y posteriormente conservamos y los colocamos en una sartén donde luego los tendremos 5 minutos a fuego lento, simplemente para darles temperatura.
Colamos el aceite de boletus porque luego nos servirá en más de una ocasión a lo largo de esta receta.
Cocemos durante 15 minutos la patata lavada y con piel, después la pelamos, la cortamos por la mitad, la salpimentamos, le ponemos unas gotas de aceite de boletus y acabamos de cocinarla en el horno a 170 º C durante otros 15 minutos.
Cuando la patata esté horneada la ponemos en un plato, colocamos sobre ella los boletus confitados ya calientes, freímos el huevo de oca en el aceite de boletus durante 2 minutos, y lo ponemos sobre los boletus. Añadimos sobre el huevo unas escamas de sal Maldon y llevamos a la mesa antes de que se enfríe.
Este es un plato para compartir con tu pareja o entre amigos bien avenidos. 🙂
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