Cocina sin Carné

Esta es la receta del salmón marinado de la madre de un amigo. Parece que Xesca Morey cocinaba muy bien y tenemos la suerte de que nos hayan pasado alguna de las recetas, de su puño y letra, con las que agasajaba a su familia en fiestas, reuniones y días señalados.

Nosotros nos hemos permitido cambiarle un poco la cantidad de pimienta y ponerle nombre, un nombre que tiene que ver con las cantidades de los ingredientes pero, hemos respetado los procedimientos tal y como ella los dejó escritos.

Ingredientes:

• 1 salmón que pese  1.700 -2.000 gr.
• 3 cucharadas de azúcar.
• 3 cucharadas de sal.
• 3 cucharadas de eneldo.
• 3 cucharadas de coñac.
• 3 cucharaditas de pimienta.

Limpiamos el salmón de cabeza, raspa, escamas y espinas, para esta receta vamos a utilizar los dos lomos limpios pero con piel. Este primer proceso es muy importante. El pescadero nos puede hacer el primer trabajo pero en casa debemos hacer el trabajo fino. Buscaremos todas las espinas que hayan quedado en los lomos y las extraeremos con unas pinzas de depilar. No os preocupéis, no es difícil pues un salmón de ese tamaño tiene las espinas bastante grandes y se encuentran y sacan bien.

Secamos bien los lomos de salmón con papel de cocina y los reservamos.

Mezclamos en un cuenco el resto de los ingredientes y hacemos con ellos una pasta.

Ponemos en un film transparente una base de la pasta para el marinado y acostamos sobre ella el primer lomo de salmón por la parte de la piel. Embadurnamos el salmón por la parte de arriba y colocamos sobre él, el otro lomo del salmón. Embadurnamos también la piel del lomo de salmón que queda arriba y envolvemos, apretando el film transparente, sobre los lomos de salmón encarados hasta tener un paquete compacto.

Lo colocamos en una bandeja en la nevera y esperamos 48 horas para poder utilizarlo.

Si en este tiempo vemos que acumula demasiado líquido el paquete del salmón, podemos hacer un corte en una esquina del film transparente para sacar el líquido que podamos.

Se sirve frío, cortado en lochas más o menos finas y acompañado de pan tostado, galletas saladas, hojas verdes, alcaparras, gajos de limón….o cualquier otra cosa con lo que nos guste combinarlo.