Este es un plato ligero, rápido y sin ninguna complicación, perfecto para el verano.
Lo único que debemos tener en cuenta es servirlo bien fresquito.
Ingredientes:
- 1/2 melón (piel de sapo).
- 1 pera Conferencia.
- hierbabuena fresca.
- vinagre de Cabernet Sauvignon.
- aceite de oliva virgen.
- sal azul de Persia y pimienta blanca.
- virutas de paleta ibérica y bolitas de melón.
Retiramos unas bolas de melón con un sacabolas y las reservamos en la nevera.
Eliminamos las pieles y cortamos el melón y la pera en trozos, salpimentamos ligeramente y a la batidora. Batimos bien y agregamos un buen chorro de aceite de oliva, unas hojas de hierbabuena picada y unas gotas de vinagre, que podremos rectificar al final si falta.
Cuando tengamos la textura deseada, probamos y rectificamos de sal o vinagre si fuera necesario.
Nosotros preferimos no colarlo pero, si quieres obtener una textura más fina, puedes hacerlo. Dejamos la sopa enfriar en la nevera, al menos una hora.
Emplatamos poniendo un par de cucharones de nuestra sopa en un plato hondo y colocando las bolitas de melón, que teníamos reservadas en la nevera, unas virutas de paleta ibérica en el centro del plato y unas hojas tiernas de hierbabuena.
Un truco muy recomendable para este tipo de preparaciones es tener en la nevera los platos, en los que vayamos a servir la sopa, durante un rato antes de utilizarlos y emplatar con celeridad para el conjunto conserve su frescura en el proceso.
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