Yo se las compraba a temporadas a mi hijo cuando era pequeño para desayunar pues era muy mal comedor y tenía que variar mucho para que no se aburriera de la comida.
Seguro que en alguna ocasión habéis probado estas ricas tortas de aceite que vienen envueltas en papel encerado y un dulce aroma de anís y aceite.
En fin, he visto la receta por la Red y no he podido resistirme. La he hecho y el resultado es muy, muy bueno.
Ingredientes:
- 5 gr. de matalauva (2 cucharadas rasas).
- Ralladura de 1/2 limón.
- 40 gr. de aceite de oliva.
- 10 gr. de manteca de cerdo.
- 10 gr. de levadura fresca.
- 70 gr. de agua.
- 20 gr. de anís dulce.
- 20 gr. de azúcar.
- 180 gr. de harina de fuerza.
- 20 gr. de semillas de sésamo tostado.
- Pizca de sal.
- Azúcar para rebozar.
Que no os amilane la cantidad de ingredientes que tiene, es una receta muy sencilla y rápida de hacer.
Empezamos poniendo en un cazo el aceite de oliva y añadiéndole los 5 gr. de matalahuva, que no es más que anís en grano, y la ralladura de medio limón. Ponemos a calentar el aceite hasta llegar a ebullición. Separamos y añadimos la manteca de cerdo, la integramos bien y dejamos templar.
Mientras templa el aceite, ponemos en un cuenco el agua, que no esté muy fría, y disolvemos en ella la levadura fresca. Dejamos actuar 10 minutos.
Vertemos el aceite sin colar en un bol grande y le añadimos el agua con la levadura, el anís dulce, el azúcar (2 cucharadas rasas, más o menos) y lo mezclamos todo con una cuchara de madera.
Vertemos sobre el bol la harina de fuerza, las semillas de sésamo y una pizca de sal y removemos, primero con la cuchara de madera y después con las manos. Obtendremos una masa floja, suave de manejar y que se despega del bol con mucha facilidad.
Dejamos evolucionar la masa, tapada con film transparente en el mismo bol, hasta que duplique su volumen.
Volvemos a amasar con las manos ligeramente para extraer el aire de la masa y formamos bolas con ella, que después iremos estirando y aplanando sobre el papel de hornear que pondremos en la bandeja del horno.
Con estas cantidades, y dependiendo del tamaño de las tortas que hagamos, salen de 10 a 16 tortas de aceite.
Espolvoreamos cada torta con abundante azúcar y las introducimos en el horno precalentado a 220-240 ºC.
No puedes despistarte pues se hacen en unos 6 o 7 minutos. Cuando veas que los bordes se oscurecen y hay zonas que empiezan a dorarse en la superficie de las tortas, es el momento de sacarlas.
Quedan sabrosísimas y crujientes y si consigues que queden de un día para otro, puedes guardarlas en una lata de galletas metálica.
TIP: Están también estupendas con un té o un café para finalizar una comida, así que yo las hago normalmente más pequeñitas y así me sirven para las dos cosas.
Como bien dices se hacen bien rapido!! tengo que probar a hacerlas en casa. Muchas gracias 🙂
Ya nos contarás!